“Quién tenga oídos que oiga”
El domingo pasado se efectuaron las elecciones para Diputados y Alcaldes en El Salvador. Siendo El Salvador un país que mucho no reconocen aún, que lo confunden y lo ubican en América del Norte o que definitivamente no se imaginaba que existiera.
Pues bien, en ese país, que se llama El Salvador la gente demostró que sabe lo que quiere; que quiere cumplir sus sueños, los de sus hijos y nietos; que a ellos les quiere dejar algo mejor, algo de que sentirse orgullosos y decirle al mundo de donde somos y para donde vamos.
El Salvadoreño supo administrar su poder. El Salvadoreño reconoció lo bueno de lo malo. Eso es sabiduría!
Ahora a trabajar se ha dicho, salvadoreños. No descansar por sostener un país con mucha riqueza humana.
De ahora en adelante se nos llama para aprovechar oportunidades para hacer y ver crecer a nuestro pulgarcito de América. A partir de hoy las puertas se abren a una nueva vida.
No olvidemos que el voto fue una parte de nuestro deber. No olvidemos que debemos trabajar a la par de nuestros gobernantes municipales. Recordemos siempre que nuestro trabajo ahora es facilitar y garantizar que nuestro deseo, expresado en las urnas, se cumpla. Recordemos que debemos trabajar por aquellas familias que más lo necesitan, por aquellas ciudades que no tienen rostro.
El domingo pasado se efectuaron las elecciones para Diputados y Alcaldes en El Salvador. Una nueva página de la historia se ha escrito.
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